domingo, 17 de agosto de 2008

Vuelve

Voy caminando hacía él, y él hacía mi. Desde lejos nuestras miradas se encuentran y ya no se apartan. Hay una luna E N O R M E sobre nuestras cabezas pero yo lo único que veo es al chico de la sonrisa a medias, sonreír como nunca había sonreído.
Un abrazo de esos cálidos. De esos que te dan un escalofrío. Vuelve mi cabeza a quedar a la altura de su hombro, vuelve su olor a impregnar mi ropa, vuelve su mirada a mirarme y su mano a coger mi mano. Vuelve él… y se va la melancolía.
Abrazo tras abrazo vuelvo a estar en casa. Aunque nunca me moví. Aunque nunca me haya ido, vuelve él, y vuelve mi hogar.
Aunque a una persona como yo, con un Master en relaciones a distancia, no debería dejarse invadir por una melancolía pegajosa por apenas unos días, aunque haya un billete de ida y vuelta, con fecha concreta, con días pactados previamente… no lo puedo remediar… Una persona como yo se ha habituado a tenerle cerca… Aunque no lo vea todos los días, saber que está aquí, donde yo estoy, en el mismo punto… es suficiente para no sentir que la melancolía se adueña de mi.
Y esa sonrisa estupida no se me borra de la cara… voy sonriendo sin poder parar… desde que nuestras miradas se cruzaron….y sus besos sello en mi frente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En algún momento,
Déjate llevar por el aire,
Déjalo que intente tocar tu interior,
Siente lo verosímil que puede ser,
Tocando su luz ,sin temer a la oscuridad.
Déjame encontrar en tus miedos,
Todos esos secretos que no quieres contar.
Déjame refugiarme en tu cielo,
Eclipsando en tus sueños
Navegar en tu mar.
Déjame, permanecer en tu tiempo ,
Disfrutar lo que el viento ,
Me a dejado alcanzar ,
Déjame pretender que mis sueños
Vivirán en lo eterno de tu inmensidad.

para la sonrisa mas bonita,es una pena que no estes sola.raul